FIEBRE AMARILLA

Anoche, buscando alimentos y tesoros, abordamos un junco chino. La tripulación no opuso resistencia, es más, nos recibieron con una sonrisa...

En menos de una hora saqueamos la nave y luego en nuestro barco, nos dimos un opulento banquete.

Hoy llevo todo el día amarillo, visitando con asiduidad mi trono, como rey de los piratas que soy. Puede ser empacho por las cantidades industriales de comida que ingerí. También puede ser fiebre amarilla.

Pa mí, que va a ser eso: fiebre amarilla.

FILIBUSTEROS

Dícese de aquellos piratas que tenían como característica especial, que los diferenciaba de otros piratas, en que no se alejaban de la costa, la bordeaban y saqueaban las localidades costeras.

Pues bien, en el siglo XXI también nos encontramos filibusteros que rebajan el nivel del mundo pirata y componen el sustrato más bajo de la piratería. Hablo de todos aquellos personajuchos despreciables que se dedican a quemar nuestros bosques.

Si por mí fuera, les colgaba del palo mayor de mi barco junto a la bandera negra mientras les quemaba los cataplines. Pero como en el fondo soy un pirata demócrata, pues que se pasen unos añitos entre muros.

Palabra de pirata.

LLEGADA A PUERTO

Desembarco en este océano maravilloso/tenebroso de Internet. Llego a Puerto Maestro después de largo tiempo navegando por esos mares de apuntes, temarios y esquemas. El flexo solar quemó mi curtida piel de perro marinero hasta que arribé en este puerto dispuesto a continuar mis viajes, después de un merecido descanso, claro.

Me retiro en breve a Isla Tortuga. En septiembre partiré hacia Los Lagos, un lugar todavía desconocido para mí y mi tripulación, pero espero ávido de aventuras, aprendizajes y retos que pongan a prueba mi valor y coraje pirata...

La vida pirata es la vida mejor,

sin trabajar, sin estudiar,

cooooon la botella de ron!!!!