Iniesta marcó ayer el gol de la victoria a cinco minutos del final de la prórroga y del comienzo de los penaltis. Los holandeses impusieron un fútbol duro, rozando lo violento.
España mereció el triunfo por las ganas que pusieron y por su apuesta por el buen fútbol, frente al antifútbol orange.
España mereció el triunfo por las ganas que pusieron y por su apuesta por el buen fútbol, frente al antifútbol orange.
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